miércoles, 17 de marzo de 2010

IL VUOTO




Siempre tuvo la teoría de que sólo se tenía que escribir cuando se tuviera algo que contar. El día le había llegado, no tenía nada que relatar pero sentía la necesidad de escribir… la última razón que le quedaba para seguir levantándose cada día. Quizás fuera por tanta lluvia, por un exceso de días nublados o simplemente por el mal llamado síndrome de la hoja en blanco, se quedó sin nada que narrar. Miraba imágenes de conflictos que siempre le habían encendido la rabia de expresar la estupidez humana… escuchaba melodías que eran capaces de provocar en el individuo cualquier cosa menos indiferencia… La Nada… sentía que Il Vuoto se había apoderado de su alma…


Hizo balance de su existencia… peor aún, el Vacío se expandía más y más. Como una señal de los dioses, un búho blanco le sobrevoló en una fría carretera secundaria y encontró citas de Leopardi en un cajón huérfano…

Era miércoles, un día cualquier de cualquier mes de cualquier año…Amaneció como de costumbre. El Sol, tímidamente surgía anaranjado de entre las nubes rojizas. Los pájaros en coro piaban con el brío que anuncia el nacimiento de una nueva oportunidad de veinticuatro horas y la suave brisa matinal, los acompañaba en sus repentinos vuelos acrobáticos.

Abrió las puertas de par en par. Respiró profundamente y un pequeño rayo de Sol incidió directamente a sus ojos y en vez de cegarlo, la luz llenó Il Vuoto…

Así como la Noche da paso al Día, el Alma puede abandonar su sepulcro ambulante en un solo instante… y dejar ser L´ombra della Luce…



“Nessun maggior segno d'essere poco filosofo e poco savio, che volere savia e filosofica tutta la vita”. Giacomo Leopardi


Dedicado a Goran Zelic

4 comentarios:

Anónimo dijo...

tu eres un hijo de puta, como te atreves a tener semejante genialidad?

Javier dijo...

Que bestia eres Nasser ¡

Javier dijo...

Para tu información, el día 1 de septiembre tengo La Benevolencija Express completa...el éxito editorial de 2011,

Anónimo dijo...

ostia...yo comienzo la cola...jajaja...un abrazo gigante.