sábado, 14 de febrero de 2009

THE FIVE SMITH´S BROTHERS


Seis, fueron seis, los cinco hermanos Smith. De izquierda a derecha, John, Georges, William, Joseph e Isaac. Cada uno representaba una parte del espíritu humano como la bondad, la determinación, la libertad, la tenacidad y la fe que hizo de Norteamérica , la tierra de las oportunidades. Testigos de los últimos cincuenta años del siglo que acababa de morir, el XX nacía con la esperanza de que el progreso evitara las penurias que sufrieron durante toda sus vidas. Nacidos en un miserable pueblo del medio oeste, los Smith estaban destinados como todos los parias del mundo a ser esclavos de un destino impuesto por su pobreza. Sin embargo, su madre Mary y su padre John, les inculcaron desde su más tierna infancia que la pobreza era un estado circunstancial del hombre y que por tanto, el valor de un ser humano se mide por su capacidad de serlo y no por los zapatos que calza. Y fue esa ,junto con lecciones de mayor profundidad, las que hicieron de los Smith hombres de una fortaleza ética inexpugnable. El siete de abril de 1905 en la ciudad de San Francisco, los hermanos se fotografiaron juntos para dar fe de la recién fundada organización, The American Foundation for Human Chances ( Fundación Americana para las Oportunidades). Su fin era claro, la ayuda sin discriminación a cualquier persona que necesitase una oportunidad para vivir con dignidad. Hoy en día, de aquello sólo nos queda el recuerdo de esta fotografía. Los valores y el espíritu que lo inspiraron, murieron cuando se relativizó la ética, los principios humanos y la dignidad en pos de una sociedad que observaba indiferente la ignominia de Guantánamo, las torturas de las democracias, y la imagen estandarizada de la muerte en África en la hora del almuerzo. Para un mundo en el cual es más importante lo que se viste que lo que se es, hablar de espíritu humano deja de tener sentido si no va acompañado de las palabras interactivo o inalámbrico. Hoy, quién observe a los hermanos Smith les parecerá “unos tíos salidos de una película del Harold Lloyd “, para mí el recuerdo de un tiempo que jamás volverá pero de un legado aún no ha muerto.

“En estos tiempos de palpable incertidumbre sólo las mentes preclaras sobreviven a tal confusión”

7 comentarios:

Tresmasqueperros dijo...

Joder, Javi, me parece que hemos publicado los cuentos al mismo tiempo. Ahora mismo me pongo a leer el tuyo.

Anónimo dijo...

A ÚLTIMA HORA, PERO LLEGÓ...


SALUDOS PERROS ¡

Tresmasqueperros dijo...

Y que curiosa coincidencia con los principios, je, je. Va a ser verdad que somos la misma persona.Un abrazo y ánimo para la semana de trabajo que te espera.

Anónimo dijo...

Aquí cada uno los hemos visto de una manera. Qué bueno corazón tienes, Javi. En cambio, Julián y yo estamos podridos y sólo nos inventamos maldades.

Un beso.

Anónimo dijo...

Que, ¿que haría con un buen premio de loteria?. Le devolvería su sentido a todas esas esperanzas que se han unido de moneda en moneda. No les privaría de su identidad plural, no las tergiversaría en una única esperanza, las extendería en su esencia. Todas esas ilusiones, pudiendo ser solo una, la The American Foundation for Human Chances ( Fundación Americana para las Oportunidades). Sabeis la que significa eso hijos de puta, ,ucha Dignidad

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Ra dijo...

Es una mezcolanza de tiempos pero a la vez una Utopía minoritaria que, en reducidos círculos existe de veras.
Un brindis por aquellas personas que intentan cambiar su mundo y el que les rodea por algo mejor.
No hay vida si la que vives no la vives con tus principios y luchas por ellos.