jueves, 25 de agosto de 2011

TUNARI

Dormían tan apretados, con sus manos aferrándose con ansia a la espalda del otro, con sus cabezas tan pegadas la una a la otra, que sus cuerpos acabaron siendo sólo uno y sus sueños, el de él y el de ella, era cada noche el mismo...

5 comentarios:

Tresmasqueperros dijo...

Aquí va esto, este pequeño cuento que no es original, se lo escuché a un cantante (junto con otras perlas) en Villa Tunari (Bolivia). Espero que sea como una pequeña bola de nieve, que al ir rodando cuesta abajo, se transforme al fin en una bola de nieve... Venga, un abrazo a la gente de Hamlet...

Anónimo dijo...

Maravilloso. Qué bonito poder experimentar algo así.UN ABRAZO.

Julián Mª Guzmán. Club de Lectura Aljaima dijo...

Gracias, anónimo, qué alegría despertarse por las mañanas con comentarios así.

Tresmasqueperros dijo...

Arrrrrrgggg, ideas, ideas, busco ideas. Madre mía que sequía...¡¡¡Maldita inspiración!Esto lo escribí hace un mes y la idea ni siquiera es mía... Bueno, espero que esto pase pronto

Ra dijo...

Lo que escribes es una falacia más de los ilusionados del Amor (que diría Jardiel Poncela)
:)
Ánimo con las musas!
Los pequeños detalles suelen ser grandes ideas.
Besosssss