domingo, 13 de junio de 2010

FEARLESS




Tuve una vez un amigo que antes de morir no paraba de decir que no tenía Miedo a nada. No se encontraba enfermo, simplemente decidió un día que el Miedo le impedía vivir. La paradoja estuvo en que al poco de ser un hombre libre, la muerte se lo llevó, tuvo poco tiempo para disfrutar de ello. A veces pienso que si no hubiera decido tal cosa quizás nos hubiera enterrado a todos nosotros.



El Miedo es un cáncer que va poco a poco eliminando todo aquello que somos, y al final, deja un triste personaje que nos recuerda confusamente aquel que conocimos…


Cada día me quedan menos amigos (es obvio) pero tengo otro que siguen vivo aún porque su Miedo consiste en "hacer las cosas bien", otro su Miedo es ser funcionario y acabar leyendo el Marca y el As en el trabajo y tomar un desayuno de dos horas antes de volver a su puesto, y prepararse para el aperitivo antes de fichar a la tres, como un buen trabajador público.



Así, os podría contar hasta el aburrimiento porque, salvo el primero que se negó a tener Miedo, los demás están bien de salud hasta el día que decidan no tener Miedo… Quizás el Miedo sea un buen conservante para todos aquellos que ya están muertos… Ah¡ por cierto, mi amigo no murió , sólo le dieron por muerto los que tenían Miedo



Dedicado a la viuda de Goran Zelic y a los 10 Miedos.






5 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya estamos con la censura..

Ra dijo...

Me ha gustado Mucho.
El Miedo es un cáncer igual. No te deja vivir. Y es complicado de vencer. Pero si no lo haces no vives.

Javier dijo...

Querido Nasser : deja el comentario con tu nombre, y no habrá censura... los anónimos són como encapuchados que no se hacen responsables de su palabras, incluso de las más bellas. No es censura.

Nasser dijo...

ok!

Me encantas...

Julián Mª Guzmán. Club de Lectura Aljaima dijo...

Sí, Javi, me ha encantado. Has vuelto con fuerzas...¡¡¡Qué alegría!!! Un abrazo de Julián.